¡Totalmente! Yo también me acuerdo de esos tiempos en los que abrías Omegle y te encontrabas con todo tipo de personajes, desde gente graciosa hasta situaciones súper raras. Había algo mágico en la imprevisibilidad de todo. Ahora, cuando entro, siento que la gente ya no se arriesga tanto a encender la cámara. Hace poco me topé con omegal y me sorprendió que sigue teniendo esa chispa. ¡Estuve hablando con un tipo que juraba que su perro podía hacer magia! Al final, es lo que más extrañamos, ¿no? Esas conversaciones inesperadas que te sacan una sonrisa.
Estadísticas: Publicado por dondiablo — Vie Abr 04, 2025 12:38 pm